· Disminuyen los decesos de mujeres por cáncer cérvico uterino desde hace diez años en esta institución de salud pública
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) impulsa la atención preventiva por encima de la curativa, de tal manera que hace diez años en Michoacán se tenían diez veces más decesos por cáncer cérvico uterino, que los que se reportaron el año pasado.
Tan solo en el 2011 se efectuaron 70 mil estudios de papanicolau, de los cuales 78 dieron resultado positivo al cáncer cérvico uterino, y de éstos se derivaron 19 decesos.
En rueda de prensa, Donaciano Valadez Raya, jefe del Hospital de Ginecología y Obstetricia; Francisca Orenia Vázquez Landín, coordinadora de Salud Pública y Norberto Ochoa Buenrostro, gineco obstetra de la misma institución, coincidieron en señalar que el cáncer cérvico uterino es curable si se detecta a tiempo.
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Agregaron que alrededor de 640 pacientes son atendidas en consultas de ginecología, de las cuales el 13 por ciento tienen resultados positivos a procesos inflamatorios, que son derivadas a los estudios respectivos de citología para descartar cáncer cérvico uterino.
El cáncer es una enfermedad silenciosa, no duele y puede ser detectado y atendido con la oportunidad debida y pare ello, las mujeres deben efectuarse sus exámenes respectivos a partir de su consultorio de medicina familiar y posteriormente su transferencia al servicio de ginecología.
El nivel cultural de la población influye en la atención ginecológica de la mujer, puesto que alrededor del 65 por ciento de la población femenina está atenta de su salud, mientras que el porcentaje restante evita la atención respectiva por patrones culturales de la población, tales como la pena, el machismo y el miedo a recibir noticias de alguna enfermedad relacionada.
Enumeraron algunas causales que influyen en la presencia del cáncer cérvico uterino, tales como el tabaquismo, múltiples parejas, múltiples embarazos y la edad temprana en la actividad sexual, entre otras.
Se pronunciaron en favor de impulsar mayores acciones de difusión entre la población, que influyan en la concientización para que toda mujer por encima de ellos 40 años de edad, acudan a los programas de prevención de cáncer cérvico uterino y de mama a efecto de evitar más muertes maternas por estos conceptos, cuando el cáncer es curable si se detecta a tiempo.
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