Anna Bolena Melendez de Excelsior.com SE LES CAYO EL TEATRO A LOS LEGIONARIOS DE CRISTO

Y sin embargo se mueve.

Anna Bolena Meléndez.

Se cayó el teatro.

Dicen que la verdad siempre cae a la mesa, que mentir nada más nos da tiempo, que más rápido cae un mentiroso que un cojo... A los Legionarios les pasó como en el cuento de Pedro y el Lobo, nada más puro enredo y a la hora de la hora... pues ya nadie les cree.

Es increíble cómo una institución de ese tamaño se puede venir abajo, no puedo creer cómo nos vieron la cara por tanto tiempo, y digo nos porque yo estudié en colegio de Legionarios y ahora siento como si la mitad de la educación que recibí fuera una farsa. Recuerdo muy bien, cuando estaba pequeña, que había un cuadro del padre Marcial Maciel colgado cerca de la dirección, la verdad, desde pequeña tengo tintes de agnosticismo y siempre me causaba ruido que tuviéramos, prácticamente, que adorar la imagen del padre. Nos hablaban de él como si fuera Dios mismo parado en la Tierra con disfraz de humano, cuando eso al papa Juan Pablo II le encantaba venir a México y fueron varias las veces que nos llevaron a La Villa a mirar a este ser que era lo más puro que había. Recuerdo cómo lo miraba hablar y me causaba toda la ternura del mundo, era un viejito adorable. Recuerdo muchos padres de los Legionarios que llegaban al colegio en carros lujosos del año y casi, casi, que con blink blink decorando sus santas vestiduras. Recuerdo vívidamente que no nos dejaban traer abajo las medias ni quitarnos el saco o el chaleco, porque se nos veía debajo de la blusa (no es verdad), y dejar ver piel aparentemente era otro de los pecados veniales que nos acechaban en cada esquina.

Entonces las denuncias comenzaron, el padre Maciel estaba abusando de niños, pero como todo, la Iglesia nos tapaba el sol con un dedo y a los estudiantes de Legionarios les llegaron a decir que “eso era un compló del demonio”, ¡whaaaaaaat!, ¿pues en qué siglo vivimos?, ¿en el de quemar a las brujas?

Hoy la Iglesia y los Legionarios aceptan, porque no quedó de otra, porque la verdad cae por su propio peso y, si de verdad existe un Dios, no los va a dejar salirse con la suya. Piden perdón por los daños causados, ¿eso es todo?, ¿perdón?, ¿van a rezar 15 Aves Marías y algunos Padres Nuestros y con eso piensan sanar el daño que hicieron a todos esos niños y sus familias? Creo que tienen el suficiente dinero como para que paguen indemnizaciones y, si se quedan sin un clavo (que lo dudo), pues que esa sea su penitencia, empezar de cero con gente sana o cerrar el changarro.

El respetado padre Maciel no solamente tenía una familia con hijos, ¡no! Tenía dos mujeres a las que embarazó y con las que convivió durante un tiempo haciéndoles creer que era petrolero. Con una de ellas tuvo una hija a quien se le sacaron fotos en el Vaticano con Maciel y a quien el papa Juan Pablo II le dio la primera comunión, o sea... ¿el Papa sabía que el creador de los Legionarios tenía una hija y no dijo nada? Y luego con la otra mujer tuvo dos hijos, familia a la que engañó y se vinieron a enterar por una portada de una revista de quién era su padre; pero acá está la cerecita sobre el pastel: los dos hijos varones de Maciel fueron abusados por su padre cuando tenían 7 u 8 años. Ese es el fundador de los Legionarios, ese hombre es la figura de respeto y ejemplo que nos enseñaron a seguir, que la Iglesia protegió sin escrúpulos, que defendían ante tantas acusaciones y que, además, estuvieron a punto de canonizar.

Siguen sin entender que no dejarlos tener sexo, familias y una vida normal, los convierte en un hervidero de degenerados sexuales. Si Dios hubiera querido que sus ejércitos en la Tierra no tuvieran sexo, les anula el instinto sexual, o no sé... Creo que se ha comprobado una y otra vez que muchos hombres y mujeres de Dios no respetan esa regla, pero además se convierten en monstruos viola- menores, que es más aterrador que una santa canita al aire.

Ahora el hermano del Papa está metido en esos mismos problemas y se ha comprobado que el mismo Papa tenía conocimiento de las marranadas de su hermano... entonces, ¿nada se va a hacer?, ¿este señor seguirá siendo la imagen de la Iglesia? Ya no saben qué hacer, definitivamente el siglo XXI es la marca que tendrán los libros de historia como la época en la que el teatro, con la temporada más larga de la historia, cayó.

¿Van a rezar 15 Aves Marías y algunos Padres Nuestros y con eso piensan sanar el daño que hicieron a todos esos niños y sus familias?